Dios de pactos (3/5). Moisés

El título de este post es técnicamente incorrecto. El tercer pacto registrado en el Antiguo Testamento no fue con Moisés sino con la nación de Israel; Moisés fue solamente el intermediario. Pero lo manejaremos así por simplicidad.

Si así lo deseas, puedes revisar los primeros dos pactos; el de Noé, y el de Abraham.

 

El pacto en Sinaí

En el libro de Éxodo leemos como el Señor sigue ejecutando sus planes con la humanidad. Cumpliendo la promesa que hizo a Abraham, libera a sus descendientes, los israelitas, de las garras de Egipto. Los llevará a la tierra prometida. Pero antes, establecerá un pacto con ellos en Sinaí:

4 «Ustedes son testigos de lo que hice con Egipto,
y de que los he traído hacia mí
como sobre alas de águila.
5 Si ahora ustedes me son del todo obedientes,
y cumplen mi pacto,
serán mi propiedad exclusive
entre todas las naciones.
Aunque toda la tierra me pertenece,
6 ustedes serán para mí un reino de sacerdotes
y una nación santa.»
»Comunícales todo esto a los israelitas.»
Éxodo 19:4-6

gc3a9rc3b4me_jean-lc3a9on_-_moses_on_mount_sinai_jean-lc3a9on_gc3a9rc3b4me_-1895-1900

Es significante que mientras los pactos con Noé y Abraham son unilaterales, este es condicional. “Si me obedecen” lee el verso 4. Israel tiene que mantener su parte del pacto. Más aun, Dios está escogiendo a un pueblo en particular. Mientras que los otros pactos fueron universales, este es sólo para la nación de Israel. Desde este momento, la historia de Israel quedará para siempre atada a YHWH.

Es importante notar, por supuesto, que la selección de Israel no significa el rechazo de las demás naciones. En su soberanía, Dios estableció que a través de este pueblo traería bendición a todas las familias de la tierra. El propósito final de este pacto es que toda la tierra conozca del Señor. Él mismo lo expresa en la Torá: “6 Obedézcanlos [las estipulaciones del pacto] y pónganlos en práctica; así demostrarán su sabiduría e inteligencia ante las naciones. Ellas oirán todos estos preceptos, y dirán: «En verdad, éste es un pueblo sabio e inteligente; ¡ésta es una gran nación!» Deuteronomio 4:6.

 

Gracia, gracia en todos lados

Si leemos la Biblia de forma superficial, puede parecer que el Antiguo Testamento expresa salvación por obras: haz esto, y vivirás; obedece, y serás salvo. Y se piensa que en el Nuevo Testamento hay un cambio abrupto a salvación por gracia. Pero eso es simplemente falso. La gracia de Dios está presente en todas partes, incluyendo este pacto. Dios primero redime a los Israelitas del faraón, y después sin pedir nada a cambio les concede el título su propia nación. Entonces, y solo entonces, establece un código ético como respuesta a lo que ya hizo. ¡Eso es simple y pura gracia!

Por supuesto que Dios espera que guarden mandamientos, pero jamás para que puedan formar parte del pueblo de Dios, sino porque ya lo son. Ya han sido redimidos, y en respuesta a ello, deberían observar la ley. Además, YHWH establece un sistema de sacrificios que permitiría al pueblo limpiar sus pecados de forma individual y corporativa.

josefa_de_ayala_-_the_sacrificial_lamb_-_walters_371193

Este es un Dios de gracia. Es un Dios que escoge y salva inmerecidamente. Brueggemann explica que este pacto “afirma que el Dios de la creación ha hecho un compromiso de fidelidad con un pueblo elegido, Israel. Este compromiso no se basa en otra cosa que en la sola resolución de Dios de esta en esta relación”.

En el libro de Deuteronomio vemos expresada esta gracia:

“7 »El SEÑOR se encariñó contigo y te eligió, aunque no eras el pueblo más numeroso sino el más insignificante de todos. 8 Lo hizo porque te ama y quería cumplir su juramento a tus antepasados; por eso te rescató del poder del faraón, el rey de Egipto, y te sacó de la esclavitud con gran despliegue de fuerza… 11 Por eso debes obedecer los mandamientos, los preceptos y las normas que hoy te mando que cumplas.” Deuteronomio 7:7-8

Nota el claro orden: “Te escogí. Te amé. Te redimí. Por eso, obedece mis mandamientos”.

 

La ley Mosaica y el cristiano

Este pacto es el más meticuloso de todos. El Señor da instrucciones que abarcan todas las áreas de la vida: el gobierno, la familia, la sexualidad, los negocios, etc. La así llamada Ley Mosaica es confusa para los cristianos. No están seguros que es lo que sigue vigente ahora que Cristo ha venido y cumplido el propósito de la ley.

Rembrandt_Harmensz._van_Rijn_079

Históricamente, los teólogos cristianos han dividido la ley en civil, ceremonial, y moral. Eruditos de hoy día definen otras tradiciones: código del pacto, del sacerdocio, de santidad, etc. Por simplicidad, usaré la categorización tradicional, sabiendo que es imperfecta.

Al parecer, la ley civil se relacionaba a Israel como nación. Pero no para nosotros, porque no vivimos en un gobierno teocrático. Sin embargo, es muy provechoso estudiar y descubrir el propósito detrás de la ley, pues presenta un principio eterno. Por ejemplo, la ley de no cosechar a conciencia el campo, sino dejar para el pobre y el extranjero, no es aplicable hoy día (¡muchos ni siquiera tenemos campo!) Pero el principio, que es cuidar del necesitado, sigue vigente.

La ley ceremonial y religiosa (sacrificios, festividades y el santuario) fueron abolida, pues eran solo sombras de los diferentes aspectos del ministerio de Jesús. Pero es igualmente provechoso descubrir a donde apuntan, para que podamos apreciar mejor el ministerio del Mesías y la forma en que Dios comunicaba las mismas verdades en la antigüedad.

Finalmente, la ley moral es aun requerida para los cristianos. Santidad a YHWH es un tema que permea todo el Nuevo Testamento, visto como principios éticos. Debido a esto, los 10 mandamientos que son el corazón de la ley Mosaica, siguen siendo vigentes. Santiago dice al respecto:

10 Porque el que cumple con toda la ley pero falla en un solo punto ya es culpable de haberla quebrantado toda. 11 Pues el que dijo: «No cometas adulterio», también dijo: «No mates.» Si no cometes adulterio, pero matas, ya has violado la ley.
Santiago 2:10-11

Santiago hace una cita directa de los 10 mandamientos. Y por supuesto, el Dios que dijo “no cometas adulterio”, también Dios “acuérdate del sábado”. La mayoría de los cristianos creen que solo 9 de los 10 siguen vigentes, o que la santidad del sábado se transfirió al domingo. En lo personal, yo creo que es más natural ver que todos ellos siguen vigentes. Al mismo tiempo, respeto a otras tradiciones que llegan conclusiones diferentes. Los considere mis hermanos; solo creo que están en un error respecto a ese punto 🙂

Como cristianos, no somos parte directa de este pacto, a menos que seamos judíos de sangre. Sin embargo. Pablo dice claramente que somos “ramas injertadas” Romanos 11:17 en el pueblo de Dios. De modo que a pesar de ser gentiles, podemos llegar a ser parte de la nación santa referida en Éxodo 19:4, como pedro lo expresa en 1 Pedro 2:9. Y debemos observar el corazón y el espíritu de la ley Mosaica.

Como los israelitas redimidos de la esclavitud de Egipto, la mejor forma de mostrar nuestro agradecimiento a Dios por redimirnos del pecado es guardando sus mandamientos. No malinterpretemos la gracia como una excusa para ceder a los deseos de la carne. En cambio, mostremos gratitud a esa gracia infinita cumpliendo el corazón de la Torá: amando a Dios por sobre todas las cosas (Deuteronomio 6:5) y amando al prójimo como a nosotros mismos (Levítico 19:18). Jesús nos pide lo mismo que le pidió a Israel después de redimirlos: “Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos” John 14:15.

 

2 comentarios en “Dios de pactos (3/5). Moisés

  1. Isa dice:

    Cinseramente el autor de este estudio tiene el amor y conocimiento de Dios estoy completamente de acuerdo y cada dia me doy cuenta que nunca vamos a ser salvos por nuestros actos pero por amor a el si puede ser posible.

    Me gusta

Deja un comentario