Un judío, un musulmán y un cristiano entran a un café, y cuando se refieren a la Biblia, probablemente estén hablando del mismo libro. Tal vez sea una gran sorpresa para los cristianos, pero ellos no son los únicos que creen en la Biblia. Las tres grandes religiones monoteístas del mundo, Judaísmo, Cristianismo, e Islam, tienen en alta estima al menos parte del libro Sagrado Cristiano.
Para los judíos, el «Antiguo Testamento» es su Escritura. Siguen a pies juntillas las ordenanzas de la Torá, Y a decir verdad la conocen, memorizan y aman más que el cristiano nominal.
Por otro lado, para el musulmán la Biblia fue originalmente dada por Dios, pero corrompida por la iglesia cristiana. Sin embargo, a pesar de dicha tergiversación, la Biblia aun preserva verdades islámicas (¡tanto en el antiguo como en el nuevo testamento!). Ellos creen en todos los profetas de Israel, y ven a Jesús como un enviado de Dios.
Si todas las religiones creen en al menos parte de las Sagradas Escrituras, ¿qué hace la diferencia? Si todos creen en Abraham, Moisés, y David, ¿por qué no podríamos ponerlos en una sala y tener un servicio de adoración común?
La respuesta es, por supuesto, tan sencilla como controversial: Jesús. El judío no cree que en él. El musulmán lo ve como un mensajero de Alá, pero nada más que un gran hombre. En cambio, para el cristiano es el hijo de Dios, el verbo hecho carne. Y es él quien marca la diferencia en la forma en que el cristiano lee, interpreta y aplica la Escritura.
Nosotros cristianos, creemos que todo, absolutamente todo en la Biblia apunta a Jesús. Toma nota; si deseas comprender el significado final de las Escrituras tienes que estar seguro que comprendes la verdad suprema que, desde Génesis hasta el Apocalipsis, todo habla de Jesús. Pablo escribe a los corintios lo siguiente: «14 Sin embargo, la mente de ellos [los judíos] se embotó, de modo que hasta el día de hoy tienen puesto el mismo velo al leer el antiguo pacto [el antiguo testamento]. El velo no les ha sido quitado, porque sólo se quita en Cristo. 15 Hasta el día de hoy, siempre que leen a Moisés [el antiguo testamento], un velo les cubre el corazón. 16 Pero cada vez que alguien se vuelve al Señor, el velo es quitado.» 2 Corintios 3:14-16
Nota la severidad y audacia de las palabras de Pablo. ¡Está diciendo que «los judíos no entienden sus propias escrituras»! (Ya me imagino cómo respondería si un americano cualquiera me dice desafiante que «los mexicanos no saben lo que es un buen taco».) Con todo, de acuerdo al apóstol, las escrituras judías solamente se pueden comprender a la luz de Jesús, el Mesías anunciado con bombo y platillo por la Torá, los profetas, y los salmos; las tres grandes secciones del Antiguo Testamento. Jesús como el Ungido anunciado es la llave de interpretación de la Biblia, y el punto de divergencia entre judíos, musulmanes y cristianos. Los primeros dos dirán que le damos demasiada importancia a un hombre. Nosotros en cambio creemos que ellos no le dan suficiente importancia al Dios que tomó forma de hombre.
De modo que, si deseas entender el meollo del asunto, debes empezar con una persona: Jesús.
P.D.
Algunos excelentes libros para comprender la Biblia a la luz de Jesús (en inglés):
Aprendiz de Teología 
Es interesante conocer para que asi caminemos seguros de que estamos caminando con Jesus
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